¿QUIÉN SOY?
Soy el Ser, el Alma, el Espíritu, el Todo. ¡Igual que tú!
Mi nombre es: Morgan Rolando Franco Vivas, vine a esta vida el 14 de enero de 1961 en Caracas. Viví y estudie en Cabudare, Estado Lara, Venezuela
Hijo de Águeda Felipa Vivas (mamama) del pueblo de Carora y José Manuel Franco (papapa) del pueblo de Aroa. A quienes amo enormemente y agradezco el que me hayan traído aquí a este mundo y a esta maravillosa GRAN FAMILIA. Enseñándome precisamente las situaciones y vivencias que yo necesitaba vivir para aprender y trascenderlas.
Mi bendición y mi amor profundo para ellos, donde quiera que estén.
Hoy en día vivo en Madrid, España. Y estoy enamorado de esta tierra; de su gente, de sus calles, sus costumbres, su comida y su clima variado.
Me siento una persona muy afortunada por estar aquí. Y agradezco a esta madre tierra y su gente por haberme acogido en sus brazos.
¿QUÉ HAGO?
TERAPIA DE TRANSFORMACIÓN TRASCENDENTAL TTT - ZEN
TAROT DEL PRESENTE OSHO-ZEN
MEDITACIÓN COTIDIANA
MEDITACIÓN UN PASO ATRÁS
¿CÓMO LO HAGO?
De dos maneras:
Hablando con la persona:
Con preguntas sencillas sobre la vida cotidiana de la persona, encuentro reflejado en las respuestas; sus “problemas”, sus limitaciones y su potencial.
Sin hablar con la persona:
Con el Tarot Osho-Zen, puedo abrir ventanas para ver en el interior de la persona; ¿Cómo es?, ¿Qué le sucede? y Qué puede hacer, para armonizar sus situaciones de vida.
Luego, a través de mi técnica:
TERAPIA DE TRANSFORMACIÓN TRASCENDENTAL TTT-ZEN, la persona
puede decidir transformarse y cambiar su situación de vida, la de su familia, sus relaciones y su trabajo. En fin, la persona comienza a vivir la vida cada día mejor y a la vez ayuda a los demás a estar mejor.
¿PORQUÉ LO HAGO?
El hecho de ayudar a alguien a encontrarse a si mismo, a encontrar su felicidad y su éxito, me llena de una enorme alegría, que ningún obsequio material puede igualar.
Todos venimos al mundo con un propósito que cumplir. Ayudar es mi Dharma; mi propósito de vida y mi naturaleza.
Cuando estoy ayudando con mi TERAPIA TTT-ZEN, estoy haciendo mi misión de vida y eso me hace feliz.
¿DESDE CUÁNDO?
Fue por los años 80, en mi época de universitario, cuando comencé a notar que la gente me hablaba de cosas que, por lo general, no hablan con los demás y menos aún con un desconocido.
En una oportunidad haciendo una larga fila para recoger unos papeles, crucé una breve sonrisa con la señora que tenía a mi lado, a los pocos minutos, luego de intercambiar comentarios inocentes sobre el tiempo, lo lento que avanzaba la fila, etc., me encontré escuchando los problemas de esta mujer.
Pero lo que más me sorprendía, era que me atrevía a ayudarla a ver mejor lo que realmente era la causa de su problema, más aún de aconsejarla. Al despedirnos su rostro tenía una expresión más serena y luminosa; aún no sé qué sería de ella, sólo espero que sea muy feliz.
Este episodio, se fue repitiendo más o menos en circunstancias similares; con algunos mantuve el contacto y comprobé que mis consejos realmente les ayudaban, lo que me llevó a plantearme que mi misión en este mundo era desarrollar esta faceta de mi vida.
Entonces comenzó la búsqueda, necesitaba una orientación más específica. Una forma de comprender esa voz dentro de mí que me decía cuál era el problema y la solución de las personas que contactaba.
Continuaba mis estudios universitarios de análisis de sistemas, cuando conocí a Haydee Oropeza, una extraordinaria persona y maestra en el arte de la sanación física y espiritual. Decidí hacerme su colaborador y discípulo. Con ella aprendí a transformar mis temores y a profundizar más aun, dentro de mí mismo y en los demás.
Mi intuición se agudizaba cada día más y con ella mi capacidad para ayudar a otras personas a sanar. En eso estuvimos varios años, me sentía feliz, alegre y satisfecho; sobre todo cuando las personas ya sana, venían a agradecer nuestra ayuda. Sentía que estábamos ayudando al mundo entero.
Sin embargo mi voz interior me decía que llegado, debía continuar la búsqueda. Tenía otra alternativa con la que me identificara y más fácil ayudar a las personas. Así que predictivo, astrología, psicología, el poder de Pero seguía sin estar satisfecho.
El panorama comenzó a esclarecerse, cuando fui invitado por Haydee Oropeza, Fernando Fersaka y Dilia Álvarez (amigos a quienes quiero mucho) a un taller de desarrollo personal. Allí, planteamientos como que somos los responsables de todo lo que nos ocurre, tanto lo bueno como lo malo; la necesidad de perdonar, no sólo a los demás, sino a nosotros mismos; la importancia de aceptarnos a nosotros mismos y a los demás tal como somos; la imposibilidad de amar a otros, si primero no nos amamos a nosotros mismos; me abrieron un panorama que comenzaba a poner en orden toda la información que había ido recopilando a lo largo de los años.
Pero mi búsqueda continuaba.
No fue sino a través de una amiga; Yadira Pirelas, y mi sobrina; Susana Egle (a quienes agradezco enormemente) cuando descubro las enseñanzas del Maestro Iluminado Osho de la India. Mi amiga tenía unas cartas nuevas, un tarot que curiosamente no buscaba adivinar el futuro sino mostrar el presente desde el interior de las personas. Yadira me dijo, que yo hablaba parecido al contenido del libro que acompaña el tarot y me pidió que las viera. En ese momento algo mágico ocurrió en mí. Todo encajó a la perfección.
El mensaje de las cartas era la respuesta que buscaba desde hacia tiempo. Fue impresionante la conexión que tuve con el Maestro Osho cuando toqué las cartas del tarot. Sin haberlas visto nunca, ya sabía el significado de varias cartas. Y sumado a mi aguda intuición, podía ya consultar a cualquier persona y responder cualquier pregunta. Era algo casi mágico, como si las conociera de otra vida y que ahora nos encontrábamos de nuevo.
Desde ese momento abandoné las consultas a otros y me dediqué a estudiar las enseñanzas de Osho, a aplicar en mí mismo su mensaje. En este período llevé a cabo mi propia transformación.
Recorrí un camino lleno de luz, paz y verdad. No todo era sencillo, porque la visión de Osho muchas veces choca con los patrones establecidos por las religiones y la sociedad. Y
como estamos criados en base a ellos, no fue fácil digerir la nueva información.
Sin embargo me di cuenta que la visión de Osho no estaba en contra de la naturaleza. De hecho sus cimientos vienen de ella. Cuando comprendí esto, se me hizo todo más fácil y muy satisfactorio. Al final me sentí un hombre renovado en todo sentido. Decidí entonces reabrir mis consultas desde esta nueva perspectiva, había dado con un lenguaje abierto, transparente y sobre todo lleno de amor, alegría y verdad.
Osho me ha enseñado a abrazar conocimientos de otras doctrinas sin tener que adherirme a ellas, he podido aprender mucho del cristianismo, el budismo, el tao, el zen. También de maestros de la nueva era como Haydee Oropeza, Belkis Mora, Carlos Fraga, Loise L Hay, Deepak Chopra, Eckhart Tolle. Y otros.
También he aprendido mucho de mi familia, de mis amigos, de un barrendero de calles, de una niña de tres años, de toda persona con quien hago contacto, de las situaciones que vivo a cada instante.
Siento que mi aprendizaje es constante y que puedo transmitirlo a los demás, por lo tanto, quiero darte la buena noticia de que la solución a cualquier problema que tengas, está dentro de ti.
¡YO TE AYUDO A ENCONTRARLA!